El pasado domingo leí el artículo de Javier Domínguez titulado “El virus desenchufa los festivales de música” y ciertamente, en estos momentos la situación es dramática para muchas de las bandas musicales. En mi caso, este sábado debería estar en Sevilla para ver a Guns and Roses, y para el concierto de Aerosmith, que se debe celebrar en un mes, tampoco pinta bien.
Grandes festivales, como el Resurrection Fest, Mad Cool, Sónar o el mítico Azkena Rock tampoco van a tener lugar este 2020. Habrá que esperar al próximo año para disfrutarlos.
Es por eso, que toda la industria musical debe empezar a preguntarse acerca de cómo orientar su modelo de negocio hacia la tan manida, “nueva normalidad”. Porque seguro que aparecen oportunidades, y hablando de un mercado que en 2019 movió cerca de 400 millones de euros, el pellizco puede ser importante.
Como bien se apunta en el artículo, durante las primeras semanas del confinamiento, fueron muchas las iniciativas musicales (y no musicales) que surgieron para dar ánimos a los fans. Muchos tuvimos la oportunidad de verlos actuar, de un modo como nunca antes. Estaban tocando desde sus propias casas, en sus salones, habitaciones o garajes. Sin duda fue una grata experiencia. Aún recuerdo ver a Ángel Wolf tocando con su habitual armónica, pero también tocando la guitarra, o al cantante de Los Gallos tocando mientras su mascota se le acercaba para recibir su afecto, como un fan más. Gracias a estas iniciativas, pudimos acercarnos un poco más a ellos.
En un futuro muy cercano, la tecnología va a brindar la capacidad de vivir una experiencia inmersiva gracias al 5G y la Realidad Aumentada. Pero también, como apunta el artículo, en el corto plazo, se pueden lanzar iniciativas más “accesibles”, como servicios exclusivos de entrevistas, video chats o incluso, por qué no, cursos. Al final, como siempre, el límite estará en la imaginación. ¿Estás dispuesto a construir el nuevo escenario de los eventos musicales?
Te invito a ser parte de la comunidad de innovación y poner en práctica todo tu potencial para construir un mejor modelo y ayudar al sector musical a continuar haciendo feliz a la gente a través de la cultura. Salud y Rock and Roll! 😉
Fuente imagen principal: Wendi Wei, en pexels.com.