Desde hace unos meses venía observando que el tiempo que dedicaba a Redes Sociales estaba por encima de lo que me parecía aceptado, por lo que decidí actuar.
Suele ocurrir que, en multitud de ocasiones nosotros mismos somos perfectamente conscientes de que estamos haciendo algo que se desvía lo que consideramos correcto, incluso sin la necesidad de realizar un control más exhaustivo, y sin embargo, aún sabiendo que estamos incumpliendo, no solemos actuar en consecuencia. ¡Eso era algo que no podía permitirme!
Mi tiempo disponible es limitado (como os sucederá a muchos de vosotros) y por lo tanto, no podía seguir permitiendo que parte de él se esfumara. Sobre todo si dicho comportamiento seguía la tendencia de las últimas semana y continuaba aumentando. Ya que, en algún momento (no muy lejano) podría impactar en los resultados clave y por ende, afectar negativamente sobre mis objetivos trimestrales.
Ya tenía el ¡porqué!, ahora quedaba identificar el ¡cómo! y finalmente el ¡qué!
En el caso del cómo, decidí buscar algún tipo de patrón de comportamiento que me permitiera conocer mejor cuando las usaba, con qué frecuencia, tiempos, desde qué dispositivos e incluso diseñé un ranking de aplicaciones. Para todo ésto utilicé la herramienta de «Bienestar digital» de mi Pixel Android.
Los datos obtenidos me permitía dibujar un roadmap de actuación. Este se convertiría en el ¡qué! y así, por fin, podría reconducirme 😉
Pues aquí vienen algunas de las acciones que tomé. Están presentadas por orden cronológico:
- Bajar el volumen de tonos y notificaciones
- Silenciar todas las aplicaciones
- Desinstalar conjunto de aplicaciones A
- Desinstalar conjunto de aplicaciones B
A día de hoy, una semana después de eliminar todas las redes sociales de mi smartphone puedo afirmar que, es lo mejor que he podido hacer. He conseguido eliminar a un importante ladrón de tiempo y aunque he empeorado considerablemente mi ranking en LinkedIn, veo que por contra, las estadísticas de mi blog siguen mejorando.
Leyendo esta entrada puede parecer que soy un poco «exagerado», sin embargo te invito a echar un vistazo a los datos que tu móvil (Android) recopila respecto al tiempo que consumes entre las distintas aplicaciones. Y ahora, piensa en todas aquellas actividades que podrías realizar empleando ese tiempo. ¿Te da vértigo?
Si la respuesta es no, ¡genial! (es tu tiempo y yo no estoy aquí para decirte lo que tienes que hacer). Si por contra, la respuesta es afirmativa, te invito a cambiar tus hábitos, trazando tu propio plan de cara a sustituir parte del tiempo «recuperado», por alguna de las actividades que tengas en tu lista de deseos.
Foto de portada gracias a Pixabay: https://www.pexels.com/es-es/foto/bajo-la-seccion-de-man-against-sky-247851/